Silvia-Heidel firmando libros
Profunda e intensa, Silvia Heidel acaba de lanzar su nueva publicación, Gaviota de Bruma. “La poesía es un ejercicio y un desafío apasionante”, afirma.

En la era pre-internet, los pueblos del interior del país eran visitados por los llamados “viajantes de libros”, que llevaban un baúl repleto de enciclopedias, diccionarios, novelas y poemarios. Con otros tiempos, pero una mística distinta, estos personajes llegaban con novedades –al estilo Melquíades, el vendedor de artilugios de Cien años de soledad– y nutrían las bibliotecas hogareñas.

Esa magia se vivía en la casa paterna de Silvia Heidel (67), en Gualeguaychú, Entre Ríos. “Todavía conservo la colección de doce gruesos tomos del diccionario mexicano UTEHA, con tapas de cuero y papel biblia, comprado por mi padre”, le cuenta a DIA 32 la escritora y vecina de Loma Verde, que este año publicó su décima obra: Gaviota de Bruma.

En su pueblo natal era habitué de las bibliotecas de puertas abiertas de las vecinas docentes, también de la del Instituto Magnasco, a unas cinco cuadras de la costa del río con su vegetación y sus aves. Terminó la secundaria y estudió en el Conservatorio Faleni; el arte estuvo siempre presente en su vida: la familia completa cantaba, participaba en coros y su padre -Alfredo- era pintor, pasión que también heredó.

El fomento de la lectura y la formación intelectual fue una constante: “Esa fe en el conocimiento como instancia superadora fue determinante para mí: soy y he sido una alumna permanente”, confiesa.

Mientras la escritora que había dentro suyo fue germinando, Silvia Heidel vivió algunos años en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde cursó estudios de Psicología. En 2000, junto a su familia, se mudó a Loma Verde buscando reencontrarse con la naturaleza y la tranquilidad. “Aquí hemos desarrollado durante las últimas dos décadas y media nuestra vida”.

Volver al vuelo

Resueltos temas familiares y laborales, cuenta que hace diez años reapareció en ella aquel viejo impulso a reclamar su cuota de protagonismo: la escritura. Fue entonces cuando inició una sostenida producción literaria, acompañada por una formación en distintas instituciones.

“Si bien he tenido un desarrollo como escritora de géneros diversos, la poesía es el formato con el que me siento más afín. Esa manera de visualizar y representar el mundo, ese captar lateral que la poética tiene, a la hora de ser traducido en lenguaje, es para mí un ejercicio y un desafío apasionantes”, comenta la escritora, que en 2013 publicó su primer libro de relatos, al que le siguieron poemarios y novelas.

En relación al contexto en el que escribe, reflexiona: “Somos protagonistas privilegiados de un momento donde la democratización en el acceso al saber ofrece oportunidades nunca antes vistas. La red de redes nos permite visitar gran parte de la biblioteca universal casi sin costos ni molestias extras. Confío en que esta situación genere lectores ávidos, inquietos, curiosos, que aspiren a que el arte sea arte, y no entretenimiento: o sea, un elemento de movilización espiritual y un desafío intelectual”.

Con respecto a su proceso de escritura, revela que es más bien diurno y caótico: “Cuando la emoción o el pensamiento me impactan, suelo anotar en el celular, de ahí paso a la computadora y finalmente someto al texto final a mis lectoras de cabecera, que son mis más feroces críticas”.

Silvia Heidel muestra su nuevo libro
Poemario en mano. Gaviota de bruma, su décimo libro, está disponible en la red de Cúspide Libros.

Gaviota de Bruma

En la portada del nuevo libro, editado por Diotima, un ave despliega sus alas sobre el nombre de la autora, mientras que un acróbata muestra su fuerza sobre una cuerda. Es la imagen de un “pensamiento con vocación de equilibrista”, dirá en el poema que le da nombre a la obra.

En sus escritos prima la enunciación de preguntas, un juego verbal a tono con la época, acompañado por el uso de distintos recursos literarios. Se ven, además, grandes interrogantes relacionados a problemáticas actuales: la destrucción de los ecosistemas, los cambios que plantea a la sociedad el avance de la inteligencia artificial, el peligro de lo nuclear.

“También las obsesiones universales de lo indecible de la muerte y la búsqueda de la resolución de muchos misterios que nos rodean. Sabemos que la ciencia los irá develando parcialmente, pero también intuimos que no serán resueltos en forma definitiva”, agrega Heidel.

En Gaviota de Bruma, si bien hay una presencia de las temáticas antes mencionadas, predomina la reflexión meta poética: la poesía que habla de sus cómo, sus qué y sus por qué.

La elección del título pone el énfasis en este proceso y surgió de una elaboración compartida con su amiga, poeta y narradora Graciela Scarlatto, quien también realiza una reseña del libro: “Allí la palabra es materia de un proceso de orfebrería, de un trabajo de depuración que va tras la polisemia, como horizonte, y de un lector co-creador”.

“Somos protagonistas privilegiados de un momento donde la democratización en el acceso al saber ofrece oportunidades nunca antes vistas”.

“Silvia Heidel es intensa. Se evidencia su recorrido interior, la libertad de su ser, rebelde en un presente que le duele y sobre el que se expresa en sus poemas… Emplea imágenes que impactan no solo por su estética, sino por su reunión de sentires, de conceptos fuertes que buscan llegar a sus destinatarios para interpelarlo”, completa Cecilia Glanzmann, también escritora.

Así, retomando la reseña de Scarlatto, Gaviota de bruma presenta al poema como búsqueda para superar las limitaciones del lenguaje. Quien asuma el desafío de leer deberá volver al ritmo de los viajantes de libros, al tiempo que precisan los versos, para conectar con ellos e ir al encuentro de algún tipo de verdad.

tapa del libro de Silvia Heidel
Novedad. Su nuevo libro de poemas fue publicado por la editorial Diotima.

FICHA PERSONAL

En constante metamorfosis  

Profesora de Música y artista plástica, Silvia Heidel cursó el Programa de Escritura Narrativa de Casa de Letras; participó en los talleres dictados por Laura Yasan, en diplomaturas y seminarios implementados por la Sociedad Argentina de Escritores (SADE) y por la Universidad de Villa María (Córdoba). También en el taller de narrativa y poética del espacio de formación literaria Ul traversal, cuya revista ha difundido sus poemas.

Cree que el estilo, la forma de escribir, es una condición cambiante: “No escribo hoy como lo hacía hace una década. Si intentara definirlo diría que, tanto mi prosa como mi poesía, son manifestaciones híbridas, donde conviven distintos géneros apoyados en obras de otros autores, con una intertextualidad que permite un movimiento de reflexiones y voces contrapuestas, reflejo de una realidad dinámica, fragmentada, que repele a la opinión monolítica”. 

Las obras publicadas a la fecha son: Con todos los sentidos (cuentos), en 2013; Cuando el silencio habla (poemas), Desde los intersticios (poemas), Con esta garganta (poemas), Como pájaros (poemas), Catálogo de la sombra (poemas), El Nato y yo (novela), 2032, Historia de una Pandemia (novela), Elegía para un no (poemas) y Gaviota de Bruma (poemas).

Menos el primero, todos sus libros anteriores fueron publicados por la editorial local Maxbrod y están a la venta en librerías de Escobar. El último, en tanto, puede encontrarse en la red de Cúspide, también con formato virtual.

Actualmente Silvia Heidel sigue escribiendo. No se detienen ni la inspiración ni las preguntas. Trabaja en una novela y en un nuevo poemario, que no tardarán en salir a la luz.