Las carreras de los futbolistas suelen tener esos golpes de suerte que pueden hacerlos crecer vertiginosamente. Ese factor, y las condiciones naturales propias, siempre harán mucho más sencillo cumplir el gran objetivo de ser profesional, ganar un dinero para acomodarse económicamente y destacarse en clubes importantes.
La historia de Pablo Erustes (30) es un reflejo fidedigno de eso, algo así como la causa y el efecto en el fútbol y la facilidad para marcar goles. Nacido en Garín, de chico se formó el Club Social y Deportivo y otros equipos de la localidad. Con los años pasó por otros clubes, hasta que recaló en Colegiales, donde llegó a entrenar con el plantel de primera. Pero por temas familiares -tiene tres hijos- y económicos decidió buscar nuevos rumbos y empezar a jugar en torneos de ligas o regionales.
“Si no tenés trabajo, es muy difícil sobrevivir. Como les pasa a casi todos los jugadores del ascenso argentino, tenía que trabajar y hacerme espacio para entrenar y jugar. Así fue casi toda mi carrera”, declaró a El Bonaerense contando sus comienzos.
Tuvo varios trabajos, el último fue en una logística. “Era salir y buscar la forma de estar en movimiento, ser competitivo. Creo que eso es lo que me ayudó a hoy estar acá y no bajar los brazos. Siempre estar activo”, contó el futbolista oriundo del barrio Cri-Cri.
Así fue como pasó por equipos que jugaban torneos en Luján, 25 de Mayo y Chivilcoy, buscando, a fuerza de goles, ser fichado por algún club que lo lleve al profesionalismo. En el intento firmó con Atlético Perú, que juega en la primera división de la Liga Escobarense de Fútbol. Tiene su predio en Tortuguitas y hace de local en Malvinas Argentinas.
Con la experiencia que arrastraba, Erustes no tardó en sobresalir entre sus compañeros: convirtió 28 goles en 23 partidos. Una cifra impresionante y un promedio de gol altísimo.
Arribo a Cusco
Los dueños de Atlético estaban relacionados con el club peruano Deportivo Municipal, entonces les comentaron a los directivos que tenían un delantero zurdo que no paraba de hacer goles. Del otro lado aceptaron ficharlo para la temporada 2023 y así fue como el artillero garinense armó las valijas.
“La gente del equipo en el que jugaba tenía un nexo con los dirigentes. Al haber hecho una buena campaña, le pasaron mis videos, mis estadísticas y por suerte se dio mi llegada a Municipal, un club muy lindo”, expresó el goleador, que usa la camiseta con el 32 en la espalda.
Aunque arrancó siendo suplente, poco a poco fue haciéndose un lugar en el 11 titular y terminó el campeonato con 11 goles y 3 asistencias en 28 partidos. Sin embargo, el equipo dirigido por el argentino Ángel David Comizzo descendió a la segunda división.
Su paso por Deportivo Municipal lo puso en el radar de otro club peruano de primera: Deportivo Garcilaso, que lo contrató para jugar la Liga 1. Erustes llegó en reemplazo de su compatriota Santiago Giordana, que fue transferido a Millonarios de Colombia después de marcar 22 tantos en 2023.
En Garcilaso, el delantero garinense lleva jugados siete encuentros y ya anotó dos goles, además de haber dado otras dos asistencias. Pero lo más importante es que se encargó de convertir el penal que llevó al club a clasificarse a la Copa Sudamericana por primera vez en su historia.
El atacante marcó el último gol de la serie -fase clasificatoria- ante Asociación Deportiva Tarma (ADT) y por eso Garcilaso jugará la Sudamericana 2024, un hecho épico para la institución fundada en 1957.
“Nunca dudamos de nosotros y quedó demostrado. Nos tocó pasar en la tanda de penales, pero fuimos con mucha fe. Yo pedí ser el quinto porque presentía que podía llegar a cerrarlo, me tenía mucha confianza”, declaró tras el partido de la clasificación.
El equipo cusqueño integrará el Grupo G, junto a Lanús, Cuiabá de Brasil y Metropolitanos FC de Venezuela. Ante este último será el debut, el jueves 4 de abril, en el estadio Inca Garcilaso de la Vega. Una gran oportunidad para que Erustes pueda mostrarse y convertir en partidos internacionales.
Un nuevo futbolista del partido de Escobar que logra cumplir su sueño. En otro país y en un club no tan renombrado, pero confiando en sus condiciones y en su olfato goleador. Pablo Erustes quiere que su apellido sea conocido en el continente y va por ese objetivo.
Rojas, Bobadilla y Vallejos
De Garín al mundo: futbolistas destacados
Pablo Erustes no es el primer jugador surgido de esta localidad que logra destacarse a nivel profesional. Ariel “Chino” Rojas, ex Godoy Cruz, Vélez, Cruz Azul y River -actualmente en Belgrano de Córdoba-; y Raúl Bobadilla, que fue figura en el fútbol alemán, jugó en la Selección de Paraguay y pasó por Argentinos Juniors -ahora está en la segunda división de Suiza-, son dos garinenses que supieron triunfar tanto en el país como en el exterior. En el fútbol femenino, Fabiana Vallejos jugó varios mundiales con la Selección, vistió las camisetas de Boca y River y ahora está en Coquimbo Unido de Chile. Otra embajadora garinense en el mundo del fútbol