Del jueves 9 al sábado 11 se llevó a cabo la segunda edición de Expo Escobar, que en muchos aspectos superó a su antecesora y en otros demostró que tiene bastante para seguir mejorando. No obstante, se trató de una propuesta dinámica, plural, entretenida, innovadora y masiva, más allá de la apabullante hipérbole marketinera con la que se promocionó antes, durante y después.
Una diferencia sustancial y favorable de esta nueva edición fue el cambio de locación: el predio de la Fiesta de la Flor dispuso de la infraestructura necesaria para montar el evento, desde los pabellones hasta el escenario del anfiteatro, el auditorio, sus oficinas y jardines. No había pasado lo mismo en la Expo Escobar 2021, que se realizó en el desértico parque industrial de Loma Verde, con un montaje hecho casi desde cero y contrarreloj.
El cambio de sede también facilitó la accesibilidad. Mientras que el año pasado la pregunta del montón era dónde y cómo ir, esta vez cualquier escobarense sabía llegar de memoria. Lo que jugó en contra fue la temperatura: el frío de los últimos días del otoño contrastó con las altas temperaturas del pasado noviembre, aunque es difícil -por no decir imposible- determinar si eso influyó en la afluencia de público. Desde el Municipio afirman que concurrieron más de 90 mil personas. Un alto porcentaje, por lo visto, fueron contingentes escolares, desde preescolar hasta secundaria.
El formato del promocionado “multievento de negocios más grande del país” -hipérbole mediante- consistió en una feria industrial, comercial y de servicios que ocupó los pabellones centrales y parte del que está cerca del lago. Según la organización, más de 400 empresas, productores, desarrolladores y emprendedores participaron de la exposición multisectorial.
Durante las tres jornadas también se llevó a cabo el ciclo de charlas Argentina Dialoga, una propuesta interesante por sus temáticas y expositores, pero de una convocatoria tan escasa que hasta más de un orador se mostró desanimado ante su reducido auditorio. Un verdadero desperdicio.
Entre los disertantes más conocidos estuvieron el economista y ex presidente del Banco Central Martín Redrado; la ex capitana de la selección de hockey femenino Las Leonas, Magui Aicega; el inventor Gino Tubaro, el conductor Julián Weich, los periodistas Romina Manguel y Jairo Straccia y el director de la revista THC, Sebastián Basalo.
El ciclo abordó temáticas tan disímiles y actuales como criptomonedas, cannabis legal, cambio climático, desarrollo sostenible, innovación, seguridad vial, planificación urbana, liderazgos, economía, educación, consumo responsable, ciberseguridad y emprendedurismo.
En un plano más trivial, que reforzó su esencia ecléctica y heterogénea, Expo Escobar también incluyó un desfile del programa televisivo La Jaula de la Moda, que se realizó el sábado, antes del cierre, con la presencia de las modelos Luciana Salazar y Karina Jelinek y de diseñadores de primera línea.
También dijo presente Cocineros Argentinos, el exitoso ciclo de la TV Pública, con una transmisión en vivo y en directo. El plato elegido no podría haber sido más escobarense: pollo al barro. Además, el público pudo disfrutar de un patio gastronómico con una variadísima oferta.
Lo más convocante, por muchísimo, fue la grilla de espectáculos, que presentó a más de 50 artistas locales en distintos escenarios -hubo tres: el principal y dos alternativos- y a figuras populares como Karina La Princesita, Vicentico y Lit Killah, al cierre cada jornada. La última, con el joven trapero como protagonista, fue la de mayor masividad (arriba de las 10.000 personas).
A contrapartida del clima festivo y alegre que predominó del jueves al sábado, la nota triste y trágica fue la muerte de un docente que recorría el predio junto a un contingente de la Escuela Secundaria Nº19 en la tarde del viernes. Se llamaba Diego Listorto y sufrió un ataque cardíaco. Sorprendió, e indignó, que la organización no haya emitido siquiera una condolencia pública.
Balance y proyección
El mentor y anfitrión del multievento, Ariel Sujarchuk, aseguró que “Expo Escobar consolidó al distrito como epicentro de negocios, de la producción y del trabajo en la provincia de Buenos Aires”.
“Este logro se alcanza con el trabajo diario de un Estado promotor que articula acciones y políticas junto a los empresarios, emprendedores y desarrolladores. Durante estas tres jornadas, estos sectores tuvieron la oportunidad de mostrarse y ampliar sus horizontes”, destacó en sus redes sociales el intendente en uso de licencia.
En una línea parecida, el ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica bonaerense, Augusto Costa, calificó al partido de Escobar como “capital productiva de la provincia”. Fue el viernes 10, durante el cierre de la Rueda Multisectorial de Negocios que se realizó en el auditorio de la Ciudad Floral.
Entre los visitantes más destacados de la escena política estuvieron, además, el gobernador Axel Kicillof, los ministros nacionales Wado de Pedro (Interior) y Juan Cabandié (Ambiente) y los provinciales Cristina Álvarez Rodríguez (Gobierno) y Leonardo Nardini (Infraestructura).
Casi todos ellos, al igual que Sujarchuk, remarcaron un dato que DIA 32 adelantó en la tapa de su última edición: que Escobar es el sexto municipio del país donde más creció el empleo registrado a nivel privado, según un informe del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación.
También pasaron por el predio ferial de la calle Gelves los intendentes Federico Achaval (Pilar), Sebastián Abella (Campana), Karina Menéndez (Merlo), Noelia Correa (Malvinas Argentinas) y Facundo Diz (Navarro).
“Cuando organizamos la primera Expo Escobar nos preguntaban si crear algo así era posible. Ya conocemos la respuesta. Y como no hay dos sin tres, a partir de mañana empezamos a trabajar en la edición 2023. No vamos a parar. Cada proyecto que empezamos lo encaramos como un nuevo sueño colectivo en el que todos y todas somos protagonistas”, prometió Sujarchuk, anticipándose a un año en el que también tendrá otros desafíos, como lograr su segunda reelección. O ir por algo aún más ambicioso.