Toda crisis puede convertirse en una oportunidad si se sabe aprovechar. Claro que no todos tienen esa posibilidad, pero hay quienes enfrentan la adversidad como un nuevo desafío y logran salir fortalecidos. En esta demoledora pandemia de coronavirus hay fábricas que debieron paralizar sus producciones, achicar horarios de trabajo y hasta suspender personal. Otras, en cambio, pudieron reconvertirse para seguir en actividad, a pesar de todo.
Un caso ejemplar es el de la empresa Bligraf, que desde 2008 se dedica a dar soluciones integrales en packaging para productos medicinales, de higiene y alimenticios. Pero ahora comenzó a fabricar protectores faciales sanitarios, confeccionadas con plástico reciclado. Sus materiales son pet cristal de 500 micrones y poliestireno de alto impacto.
Ya han vendido miles de máscaras a industrias, dependencias de salud y a diversos rubros. “Decidimos que el 10% de lo que vendamos sea donado a la Secretaría de Salud de Escobar, para la protección de los médicos y auxiliares, que aportan un rol imprescindible”, le cuenta a DIA 32 el director de Bligraf, Sergio Munné.
La firma cuenta con unos 80 empleados, entre permanentes y temporarios, y a fines de abril tenía cerca de 60 trabajando en su planta de Loma Verde, ubicada en el kilómetro 56 de la Colectora Este. Para abastecer la demanda estuvo activa muchos días las 24 horas, en tres turnos. La idea es seguir fabricando estos protectores cuando pase la emergencia sanitaria.
Un caso similar es el de la empresa Buco, que desarrolla y fabrica piezas de caucho de alta calidad para el sector automotriz, agrícola, ferroviario, de gas y petróleo. Radicada en el Centro Industrial de Garín, también empezó a desarrollar máscaras de bioseguridad para abastecer a dependencias sanitarias, fábricas y entidades.
Otra empresa del corredor industrial de Garín que se reconvirtió ante la pandemia es Göttert S.A. Es una firma familiar de gran proyección, que diseña, produce y comercializa servicios de montaje y asistencia técnica de equipos para la industria, exportando al mundo.
Ante la necesidad del sector público de reforzar la estructura sanitaria para dar respuesta a la pandemia, Göttert decidió volcarse a la construcción de camas hospitalarias al costo. Son unidades de sencillo diseño, muy fáciles de armar y transportar.
La idea surgió entre los tres hermanos que manejan la empresa. Querían colaborar desde su lugar, el equipo de ingeniería diseñó el modelo y así pusieron manos a la obra. “El primer día fuimos a la planta siete personas, hicimos el prototipo, lo mejoramos y empezamos a producir. Teníamos para hacer cien camas, Siderar movió su stock y conseguimos más material. Tenemos listas 900, de las cuales ya entregamos 700”, señala el gerente general, Fernando Göttert.
Las primeras 400 camas fueron donadas al Municipio y al sistema de salud nacional. En señal de agradecimiento, el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, y el intendente Ariel Sujarchuk visitaron la planta el miércoles 8.
“Esta actividad es sin fines de lucro, lo único que pretendemos es cobrar el valor de los materiales. Las entidades que no pueden afrontar el gasto tienen que hacérnoslo saber y juntos buscaremos la forma de resolverlo”, afirma el gerente de la compañía.
Desde la Unión Industrial de Escobar (UIDE) felicitaron la capacidad innovadora y actitud solidaria de estas empresas, alentando a que otras se inspiren en este tipo de ejemplos. “Muchas veces la crisis es una oportunidad para producir nuevas cosas, transformando alguna línea de producción que quedó inutilizada. Es el ADN del industrial, estar en permanente desarrollo. El que va a sobrevivir es el que innova, el que está a la vanguardia”, asegura su presidente, Marcos Villar.
“Bligraf es un caso de reconversión nata de una empresa que hace envases por termosoplado y hoy fabrica máscaras. Lo mismo Buco, que elabora piezas para agropartes. Göttert es una industria exportadora que vio la oportunidad de aprovechar su maquinaria para las camas sociales. Son casos claros de empresas que terminan siendo solidarias”, puntualiza el dirigente pyme, que fue uno de los primeros casos positivos de Covid-19 en Escobar y logró recuperarse satisfactoriamente.
Como conclusión, remarca la importancia de unirse para sacar adelante causas tan delicadas como esta pandemia. “Se va creando un efecto contagio, ya hay otras firmas que están queriendo hacer colaboraciones. Bienvenida la solidaridad del argentino, la grieta quedó a un costado. En las crisis, somos todos un equipo”, afirma, esperanzado.