Ya sea porque es un “trabajo” rápido y bien pago -desde $3 mil por auto levantado en la calle-. Bien porque es un delito difícil de probar y con una pena excarcelable -de 1 a 3 años de prisión-. O, simplemente porque es un negocio millonario gracias a los ciudadanos “de bien” -las autopartes en el mercado negro cuestan entre un 30 y 40% menos que en el legal-, desde un largo tiempo a esta parte el robo de vehículos se convirtió en moneda corriente en todo el país. En el partido de Escobar puede decirse que la modalidad recrudeció de manera alarmante, ya que un reciente informe de la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) reveló que este tipo de ilícitos aumentó casi la mitad durante 2017. Un récord lamentable.
A través de los datos que envían las compañías aseguradoras que operan en el ramo “Automotores” a los sistemas IRIS (Control de Fraudes de Automotores) y PrismaNET (Plan Estadístico del ramo Automotores), el organismo descentralizado dependiente del Ministerio de Hacienda publicó el 10 de agosto un documento de 71 páginas en el que se consigna que en Escobar se denunciaron 817 sustracciones de todo tipo de rodados durante el año pasado. Una cifra que supera ampliamente los 548 registrados en 2016.
De esta manera, es el municipio con mayor crecimiento de esta modalidad delictiva en todo el país, con un alarmante 49%, lo que representa un promedio de 2.2 casos por día.
La información recopilada sobre el distrito detalla que en 2017 hubo denuncias por la sustracción de 549 autos, 227 motocicletas y 19 camionetas, los tres tipos de vehículos más robados. Eso sin contar los siniestros que no fueron denunciados por falta de cobertura. Las estadísticas se dispararon si se tiene en cuenta que durante el año anterior apenas había crecido un 1.8% (de 538 a 548 denuncias) y desde 2008 hasta 2016 el aumento fue de 33%.
A su vez, es la jurisdicción que manifestó el mayor crecimiento a nivel nacional en lo que se denomina “frecuencia siniestral”, es decir, la cantidad de daños, robos o incendios sobre el total de cascos asegurados. Según las estadísticas, 1.4 de cada 100 vehículos registrados sufrió algún tipo de percance -durante 2016 era 1 cada 100-, lo que implica un aumento de 44.2% en este ítem, por encima de Berazategui (33.2%) y San Isidro (20.6%).
En ese marco, las cifras sostienen que las motocicletas son los vehículos más siniestrados, con una frecuencia de 5.77 cada 100, muy por encima de los automóviles (1.15) y las camionetas (0.63).
Otro dato que arroja la publicación es el descenso de 10% del robo parcial de automotores en el distrito: de 1.127 a 1.021, con 2.2 siniestros cada 100 cascos. Se trata de hechos en los que se sustraen elementos que pueden variar entre ruedas, espejos o estéreos.
Por otra parte, el informe de la SSN agrega que en Escobar hay 56.519 vehículos con cobertura de robo total. De ellos, 47.769 son autos, 3.936 motos y 3.034 son camionetas. En tanto que a nivel nacional hay casi ocho millones de coches asegurados contra todo riesgo y la tendencia de sustracciones totales ha descendido de 180 a 175 por día (3%).
Igualmente, si se tiene en cuenta a todo el país, las noticias tampoco son buenas: en 2017 se produjo un total de 1.585.031 siniestros -4.342 por día-, es decir, un 8.4% más que en 2016 (1.461.956).
El informe también reveló que los cinco modelos de autos más robados son Volkswagen Gol, Renault Clio, Chevrolet Corsa, Renault Kangoo y Fiat Uno.
“Estos estudios estadísticos permiten enriquecer el análisis del mercado asegurador, ya que resulta de importancia comprender desde dónde partimos para proyectar y potenciar nuestros desafíos de crecimiento y consolidación de la industria a largo plazo”, afirma el comunicado del organismo, que tiene como función proteger los derechos de los asegurados mediante la supervisión y regulación del mercado asegurador.
Impacto oficial
El informe de la SSN no fue una noticia precisamente agradable para el gobierno municipal. Incluso, los guarismos sorprendieron por ser un fuerte contrapunto de la inversión que se está realizando ya sea a través de cámaras de seguridad -hay 700 activas-, la ampliación del Centro de Monitoreo, la apertura de postas de prevención y el despliegue de la Policía Local.
“Cuando iniciamos la gestión, a fines de 2015, y vimos cómo se iba desarrollando el delito en general, no solo el robo automotor, les pedimos a las autoridades policiales que sinceren la estadística, porque si nosotros no sabemos la realidad de lo que pasa en el distrito nunca vamos a poder darle una solución a la problemática. Y ese sinceramiento recién llegó a partir de 2017”, explica la Secretaría de Seguridad y Prevención Comunitaria, Graciela Cunial, a DIA 32.
La ex comisario general sostiene que la cifra real no llegaba a su escritorio “porque no había una coordinación con las comisarías”. Pero afirma que esa relación empezó a aceitarse y ya está dando resultados, a partir de los constantes operativos de prevención que se hacen de manera conjunta con la Policía Bonaerense. “La estadística ha bajado sustancialmente en lo que va de 2018 en relación al año pasado”, asegura.
Como prueba de ello, revela que el promedio de denuncias por vehículos sustraídos pasó de 42 a 33 por mes, es decir, un 24% menos. En ese marco, el 50% de los casos corresponde al robo y o hurto de motocicletas, “hechos que antes no se denunciaban por falta de papeles, y eso no es un dato menor”, aclara.
“Estamos poniendo a disposición todos los recursos que tenemos para librar esta batalla”, señala, aunque, a su vez, confiesa que no es fácil combatir a los robacoches, y más cuando se está tan cerca de la Panamericana, “la vía de escape rápida por excelencia”.
Planificación permanente
“Lo que hacemos es planificar de forma permanente, porque cuando hablamos de delito lo único permanente es el cambio. Los delincuentes mutan, hoy los tenemos en Garín, mañana van a Escobar y pasado a otro lugar. Entonces, tenemos que estar planificando todo el tiempo para evitar que estas cosas ocurran”, explica la funcionaria. Por este mismo motivo es muy difícil confeccionar un “mapa de calor” del robo automotor.
“Últimamente se dio más en Garín y Maschwitz. Pero no hay un ‘Triángulo de las Bermudas’ en Escobar, porque los autos no desaparecen, aparecen y, por lo general, en partidos limítrofes, como Pilar y Tigre. Por eso, puntualizamos los operativos cerrojo y pusimos las cámaras lectoras de patentes sobre las rutas 25 y 26. Por semana, tenemos diez alertas de vehículos con pedido de secuestro que son leídos por estas cámaras. Realmente, estamos trabajando muy bien”, concluye Cunial, optimista por las nuevas cifras elaboradas por el Laboratorio de Seguridad Ciudadana que funciona en el Centro de Monitoreo de Garín.
Suele decirse que las estadísticas son frías, pero en el caso del robo automotor los números indican que Escobar se convirtió en una zona caliente.
RICARDO GONZÁLEZ
“Escobar está en una zona de bajo riesgo”
A pesar del fuerte incremento del robo automotor registrado el año pasado, el conocido productor y asesor de seguros afirma que es poco probable que el distrito sea recategorizado por las compañías. Además, señala que la mayoría de los robos ocurren en otras localidades.
-¿De qué manera puede afectar al rubro el incremento del robo automotor?
-Todo lo que es siniestro siempre afecta, desde ya que es así. Lo que a veces puede suceder es que zonas como la nuestra, que a lo mejor están en un “bajo riesgo”, pueden llegar a ser recategorizadas por la alta siniestralidad. Es decir, que el seguro le saldría más caro a la gente. No te digo que sucede, pero puede suceder. En algunos casos sí y en otros no.
-¿Qué debería suceder para que Escobar pueda ser considerada una zona de riesgo “medio” o “alto”?
-Lo que pasa que no es una cuestión que se va a implementar de forma general. Es una decisión que depende de cada compañía. No es que va a salir una ley que va a decir ‘En Escobar ahora van a tener mediano riesgo’. Son políticas particulares de las compañías.
-¿O sea que un mismo productor podría vender una póliza de seguro de “bajo riesgo” y otra similar de “mediano riesgo”?
-Exactamente.
-¿En base a que variables se categoriza el riesgo de una zona?
-Normalmente, siempre se tomó el sector que va desde Capital Federal hasta cincuenta kilómetros hacia el norte como mediano riesgo. Y desde cincuenta kilómetros en adelante, bajo riesgo. Nosotros estamos justo en el límite, por eso hay compañías que trabajan con mediano riesgo y otras que trabajan con bajo riesgo. Si estuviéramos en Campana, te diría que normalmente todas trabajan con “bajo riesgo”.
-¿Usted pudo percibir el incremento de robo automotor registrado por la Superintendencia de Seguros de la Nación?
-La verdad que no. Son épocas. A veces surgen más robos de cubiertas, por ejemplo. En cuanto al robo de unidades, lo que pasa es que nosotros estamos cerca de Capital y de zonas que son de mediano y alto riesgo. Yo te diría que entre un 60 y 70% de las denuncias por robos de unidad que recibimos fueron hechos en otras zonas. Nos toca eso porque la gente de Escobar, en general, sale a trabajar a los alrededores.