Por CIRO D. YACUZZI
cyacuzzi@dia32.com.ar
Desde el 1º de enero, la línea 276 cambió de manos y de nombre. Desgastada entre continuos conflictos gremiales y dificultades operativas, la empresa escobarense fue adquirida a fines de 2013 por La Nueva Metropol, el mascarón de proa de una de las corporaciones de transporte urbano más robustas del país, y pasó a llamarse Isleña Metropolitana.
Sobre los motivos de la venta circularon diversas versiones, entre ellas que La Isleña estaba al borde de la bancarrota. Sin embargo, un ex directivo de la compañía desmintió enfáticamente a DIA 32 ese rumor. “No era una empresa endeudada ni había pedido de quiebra. Sí estaba descapitalizadaza y tenía un parque automotor bastante envejecido, con 11 años de promedio”, afirmó.
La misma fuente apuntó que los problemas de la empresa pasaban por los permanentes roces con el sindicato de choferes (UTA) y las complicaciones que surgían a la hora de cobrarle al Estado el subsidio por el combustible, cuya incidencia en los ingresos globales de la compañía representaban “alrededor de un 80%”.
Al respecto, el ex directivo sostuvo que en torno a la 276 se montó una operación orquestada entre actores sindicales, empresariales y políticos para llevarla a una situación de inestabilidad económica que forzara su venta.
“El sindicato operaba con amenazas de paro y con planchar la línea. Además, hubo gestiones económicas para voltearla y poder comprarla. Incluso tuvimos que bancarnos seis meses sin cobrar el subsidio, que era un millón de pesos por mes”, adujo.
De brazos caídos y desganados para seguir enfrentando ese escenario, la mayoría de los socios coincidió en que lo mejor era sentarse a negociar el traspaso de la empresa de colectivos más antigua del distrito -fundada en 1945, tuvo varios dueños y se constituyó como SRL a mediados de los ’60-, que diariamente recorre 150 kilómetros uniendo los partidos de Escobar, Pilar, Luján, San Andrés de Giles y Carmen de Areco.
Nueva etapa y hermetismo
A partir del 1º de enero, el grupo empresarial misionero controlado por la familia Zbikoski tomó plena posesión de la 276, dotada de una nómina de 240 empleados y una flota de 74 unidades. Despedir a unos 30 choferes que estaban a prueba, reubicar al personal, eliminar las máquinas expendedoras de boletos y suprimir la tarifa diferencial para jubilados fueron algunas de las primeras medidas.
Con el paso de los días también pudieron verse buenas señales, como la incorporación de varias unidades Mercedes Benz cero kilómetro y la mejora en la frecuencia de algunos recorridos. En tanto, el nuevo diagrama de horarios sigue siendo una incógnita y estaría definido recién en marzo.
Por lo pronto, el hermetismo comunicacional de la empresa es absoluto. Pese a varios intentos, resultó imposible para DIA 32 acceder a un vocero de la nueva administración para conocer los planes del flamante permisionario. En ese sentido, la incertidumbre y la preocupación envuelven por igual a empleados y usuarios.
“Estamos en medio de un proceso de transición que lleva tiempo y que recién empezó hace unas semanas”, se excusaron con esta revista desde las oficinas centrales de La Nueva Metropol, un gigante que no para de crecer y que acaba de plantar bandera en Escobar.
Por todos lados
En la actualidad, La Nueva Metropol transporta a más de 15 millones de pasajeros por año y recorre unos 20 millones de kilómetros por medio de sus siete líneas: 65 (Constitución-Barrancas de Belgrano), 194 (Chevallier Metropolitana), que abarca el ramal Buenos Aires-Zárate, 195 (Costera Metropolitana, ex Costera Criolla), que presta el servicio Buenos Aires-La Plata, y la 228: Puente Saavedra-San Nicolás.
También maneja la línea 194 Plus (Saavedra-Av.Cabildo-Plaza Italia-Av. Pueyrredón), la 365 (Independencia Metropolitana, ex LISA), que abarca el tramo Puente Saavedra–Derqui-Luján), y la 151 (MODO), cuyo ramal troncal es Plaza Constitución-Puente Saavedra.