Dentro de una gran temporada para los deportistas del partido de Escobar, alguien que se destacó mucho y de forma repentina es Malena Galván (18). La joven atleta participó en un Sudamericano y un Mundial para menores de 20 años, con excelentes resultados. Además, logró la medalla dorada en los Juegos Bonaerenses.
Su historia en el mundo de las pistas es bastante particular. Empezó hace poco tiempo y logró actuaciones muy destacadas en las pruebas de velocidad, aunque, llamativamente, esa no era su especialidad, ya que al principio estaba más volcada a los saltos.
Su acercamiento al atletismo se dio en 2021, cuando iba al 4º año del Colegio San Vicente de Paul y se frustraba en las competencias de salto en largo. “Una vez hice nulos todos mis intentos en los juegos de Educación Física y dije: ‘No puede ser, tengo que aprender a saltar’. Por eso empecé a ir al polideportivo (Luis Monti)”, le cuenta a DIA 32, que la entrevistó en un parate de sus entrenamientos diarios.
“Mi gran cambio dentro del atletismo fue a fines de 2023. Hice una muy buena pretemporada y me puse objetivos. Empecé más en serio el gimnasio, fui a la nutricionista y comencé a cambiar el rendimiento”, explica, demostrando su madurez y ganas de progresar.
Ya insertada en las pruebas atléticas, la competencia que hizo un clic en su carrera fue el Grand Prix “Challenger José de Zubiaur”, de carácter sudamericano, que se disputó en abril de este año en Concepción del Uruguay, provincia de Entre Ríos. Salió campeona en los 400 metros, con un tiempo de 56’’0/100. “Desde ese día empecé a anotarme en más eventos y fui mejorando”.
Esa actuación y otro primer puesto en el Nacional de Mayores, en Mar del Plata, solo una semana después, le valieron una convocatoria para integrar la Selección de la Federación Atlética Metropolitana (FAM).
Sudamericano y Mundial Sub 20
En junio tuvo otro gran paso, cuando en el Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CeNARD) ganó el Nacional Sub 20 en 200 metros y clasificó 2º en los 400, bajando su marca a 55’’68/100. Así logró su pasaporte para el Sudamericano de la categoría, que se hizo en Lima, Perú, del 12 al 14 de julio.
En tierras incas corrió en cuatro competencias. En 400 metros salió 5º en la serie y 4º en la final, con un tiempo (55’’37/100) que le dio lugar para disputar el Mundial Sub 20. Además, en las pruebas de postas ganó dos medallas de plata. En la femenina de 4×400 metros, el equipo logró el récord argentino de 3’45’’22, registro que no se mejoraba desde 1978. Sus compañeras fueron Helen Bernard Stilling, Isabel Conde y Juana Zuberbuhler. El otro segundo puesto fue en la posta mixta de 4×400 metros, con Tomás Miron, Manuel Juárez e Isabel Conde. El cuarteto totalizó una marca de 3’27’’72.
“El Sudamericano fue súper lindo. Desde que empecé a correr quería representar a Argentina en una competencia internacional. Haberlo logrado me puso muy feliz. Después fui al Mundial y eso fue inigualable, no lo puedo comparar con nada de lo que viví. Una experiencia increíble. El hecho de poder compartir con tantos países me dio la certeza de que estoy haciendo lo que me gusta y lo quiero seguir haciendo”, sostiene, feliz.
Durante el XX Mundial para menores de 20 años, en Lima, Malena participó en tres pruebas: una individual y dos de postas. En 400 metros salió 36º entre 52 chicas, con un tiempo de 55’’ 37/100, igualando su mejor marca personal en esta distancia. En la posta femenina compitió en 4×400 metros junto a sus mismas compañeras del Sudamericano, quedando 12º sobre 16 equipos (3’47’’10/100), a solo diez segundos del top 8. Por último, en relevos mixto de 4×400 metros, junto a Celeste Molina, Manuel Juárez y Tomás Mirón terminaron 19° sobre 22, (3’29’’28/100).
Para completar un semestre notable, en octubre viajó a Mar del Plata para disputar sus últimos Juegos Bonaerenses, en busca de la medalla de oro que le faltaba. También la consiguió, para completar su colección.
“Este año competí por tercera vez en los Juegos. La primera vez (2022) conseguí un tercer puesto en salto en alto, el segundo año fui medalla de plata y este año logré la de oro (en 400 metros), que tanto estaba buscando con mi entrenador. Fue la mejor manera de cerrar esta etapa y muy lindo compartir un viaje así con mis compañeros de equipo”, afirma.
Entrenar para mejorar
A pesar de su corta edad, Malena Galván es muy consciente de sus virtudes y defectos. Sabe que el deporte es perfeccionarse día a día y pulir detalles constantemente. “Tengo cosas por mejorar y sé que puedo hacerlo. No soy tan buena saliendo de taco (largada), estaría bueno corregirlo. Y también me gustaría mejorar la resistencia, es algo que me falta”, asume, sincera.
Para eso entrena a diario con el equipo de profesores de la Escuela Municipal de Atletismo, con Javier Amarillo a la cabeza y Matías Mendoza como entrenador personal. “El polideportivo de Escobar es como mi segunda casa, mi familia. En poco tiempo se hicieron todos muy importantes para mí. La Escuela es muy buena, te enseña valores y tuvo un crecimiento grande en todos los aspectos: los materiales, la ropa, y los profesores, que también crecieron en el conocimiento. Eso se nota”, señala, sobre el ámbito y el grupo de trabajo en el que está hace más de tres años.
Mientras tanto, combina su rutina en la pista de atletismo con los estudios. Este año hizo el Ciclo Básico Común (CBC) de la Universidad de Buenos Aires y se prepara para la carrera de Diseño Gráfico. “Es otra parte de mí que me encanta, la artística. No seguí nada relacionado al deporte porque prefiero que siga siendo algo que me gusta hacer y no convertirlo en un trabajo”, señala.
Para 2025 Malena tiene grandes objetivos, más allá de las competencias del calendario metropolitano y los nacionales. Estarán en disputa las clasificaciones a los torneos Sudamericano y Panamericano Sub 20, y también se harán los Juegos Panamericanos Junior.
“Quiero clasificar a esos torneos. Mi idea es seguir siendo atleta de alto rendimiento. Este año logré llevarlo bastante bien con el estudio. Los demás seguramente sean más complicados, pero con organización todo se puede”, sostiene la joven atleta escobarense, con la misma claridad que va en busca de la meta en cada carrera.