Ariel Sujarchuk dio con firmeza el primer paso para encaminarse sin obstáculos hacia su tercer mandato en la Intendencia de Escobar. Se impuso en todas las localidades, superó los 48 puntos y le sacó 24 de ventaja al segundo candidato más votado en las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) del pasado 13 de agosto.
De acuerdo al escrutinio definitivo, el intendente y candidato de Unión por la Patria obtuvo el 48,2% de los votos afirmativos (59.510). Empujado por el arrastre de Javier Milei, el concejal Eduardo Gianfrancesco, de La Libertad Avanza, logró la segunda colocación con el 24,3% de los sufragios (30.347).
Bastante más atrás, en la tercera ubicación, quedó Walter Klix, que ganó la interna de Juntos por el Cambio por un margen muy exiguo: el candidato de Patricia Bullrich logró un respaldo de 11,4% (14.189 votos), mientras que el de Horacio Rodríguez Larreta, Mariano Castagnaro, sacó 10,8% (13.521) y quedó fuera de competencia.
La otra interna de las PASO fue la del Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), donde la lista encabezada por Sandro Salazar (PTS) se impuso con el 1,8% (2.287 votos) a la que llevaba como precandidata a intendenta a Nieves Murphy (PO), que cosechó un magro 0,8% (1.060).
Las restantes trece listas que participaron de las primarias tuvieron un rol tan intrascendente que ninguna alcanzó el piso de 1,5% necesario para poder intervenir en las elecciones generales del próximo 22 de octubre. En total, apenas sumaron 2,7%.
La participación electoral orilló el 70% del padrón, donde había 210.260 escobarenses habilitados para sufragar, y fue la más baja en una PASO presidencial.
Dentro de los votos no afirmativos se contabilizaron 17.470 en blanco (12,1%) y 989 nulos (0,8%).
Festejar y reflexionar
La noche del domingo 13 no fue precisamente de algarabía en el Consejo de Partido del PJ, donde se reunió la militancia peronista cuando finalizó el escrutinio. La derrota de Unión por la Patria a nivel nacional a manos de La Libertad Avanza fue un mazazo indisimulable, difícil de digerir en tiempo real.
Tampoco el triunfo local daba margen para la euforia, porque era previsible -absolutamente nadie creía que Sujarchuk podía perder- y porque no alcanzó el objetivo de perforar la barrera de los 50 puntos.
“Este caudal de votos nos tiene que comprometer a tener más humildad, más sinceridad, más cautela y mayor cercanía con la gente. Hoy es un día para estar muy contentos por este triunfo en Escobar. Hay que festejar este triunfo y reflexionar”, analizó y pregonó el intendente ante sus seguidores intentando levantar el ánimo, pero sin ocultar el impacto por la derrota de Sergio Massa en la elección presidencial.
Comparando con las PASO de 2019, donde empezó a jugar su reelección, Sujarchuk resignó casi veinte puntos porcentuales. Claro está, en aquel momento la fórmula presidencial de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner corría con viento de cola y no de frente, como pasó ahora con el ministro de Economía, que en esa comparación también obtuvo un caudal muy inferior como cabeza de boleta.
“Mañana tenemos que poner el cuentakilómetros en cero, porque empieza una nueva campaña. Lo que viene por delante es una lucha épica, que a los militantes nos llena el alma y nos hace palpitar. Con el inventario de propuestas que le vamos a llevar al pueblo de Escobar, este triunfo se va a ampliar sustancialmente”, garantizó.
Escolta y expectante
Si alguien tocó el cielo con las manos después de las PASO fue, sin dudas, Eduardo Gianfrancesco, quien de la noche a la mañana se erigió en el principal adversario, al menos electoral, de Sujarchuk.
Un mes y medio antes del cierre de listas Gianfrancesco tomó la decisión de dejar el bloque de concejales de Juntos por el Cambio, al que ingresó por una suplencia, para plantar la bandera de La Libertad Avanza en el Concejo Deliberante.
Muchos, en las redes sociales, reprobaron su actitud, lo calificaron de traidor e incluso le exigían que renuncie a su banca o la devuelva. Sin embargo, ese salto de garrocha de último momento le permitió posicionarse hoy como el referente más visible de la oposición.
“Teníamos el pálpito de que nos iba a ir bien, porque la gente nos lo hacía sentir en la calle durante toda la campaña. Nos pedían boletas y nos daban muestras de apoyo”, aseguró Gianfrancesco, aunque no ocultó su sorpresa por el triunfo de Milei. “Esperaba un poquito menos”, admitió el concejal maschwitzense, de pasado pattista. A nivel local, uno de cada 4 votantes de Milei cortó boleta.
“Lo que viene por delante es una lucha épica, que a los militantes nos llena el alma y nos hace palpitar”, expresó Sujarchuk.
“El principal trabajo que voy a estar haciendo de acá a la elección del 22 de octubre es que haya un fiscal de mesa en cada escuela, en cada localidad, para que no nos roben los votos. Si logramos el resultado que logramos con la cantidad de artimañas que nos hicieron, si tenemos más vecinos que se comprometan a cuidar el voto y a ayudarnos, vamos a tener un mejor resultado”, sostuvo, optimista.
Por lo pronto, aunque no le alcance para asustar a Sujarchuk, con los votos que sacó en las PASO sus tres primeros candidatos a concejales quedaron con un pie en el Concejo Deliberante: Mariana Huber, Diego Muzzio y Sandra De Boeuf, su novia. Nicolás Díaz es el cuarto y para entrar necesita que Gianfrancesco supere los 25 puntos. Nada imposible.
Remando desde atrás
Walter Klix vivió las PASO con emociones múltiples, intensas y diversas. Por un lado, tuvo su debut electoral y ganó la interna de Juntos por el Cambio en Escobar; pero por otro, su esposa no tuvo la misma suerte en Entre Ríos, donde compitió contra otras cinco listas y quedó tercera.
El candidato a intendente de Bullrich tuvo una pulseada muy pareja con Castagnaro, a quien venció por menos de setecientos votos. Fue un triunfo exiguo, de bajo caudal en términos porcentuales, pero triunfo al fin, que lo deja en carrera para octubre.
A esa alegría se le sumó también el hecho de que su jefa política se haya impuesto a Larreta en la interna opositora, quedando como candidata a presidenta. Aunque ella tampoco logró guarismos para jactarse, el primer objetivo era ganar y ambos lo consiguieron.
Sin embargo, no fue un domingo perfecto para Klix, quien también tenía su corazón puesto a 450 kilómetros de Escobar: su esposa, la diputada provincial entrerriana Ayelén Acosta, no pudo cantar victoria en la interna por la intendencia de Paraná, de donde es oriunda.
Acosta quedó tercera en esa contienda, con 10.749 votos (19,3%), según el escrutinio provisorio. El ganador fue Emanuel Gainza, con 23.888 sufragios, mientras que segunda se ubicó la diputada provincial Lucía Varisco, con 13.070. Además, compitieron otras tres listas.
Klix tiene domicilio en Ingeniero Maschwitz y por eso pudo postularse en Escobar. Los votos que obtuvo le alcanzan para dos bancas, pero sumando los de Castagnaro estaría en condiciones de consagrar tres concejales y hasta disputar un cuarto. Si logra eso, podrá decir misión cumplida.
TRIUNFOS OFICIALISTAS
La elección para gobernador y para presidente
En el partido de Escobar el candidato a gobernador más votado fue Axel Kicillof, de Unión por la Patria, con 38,9% y una ventaja de diez puntos sobre Carolina Píparo (28,6%), de La Libertad Avanza. En tercer lugar, muy parejos, quedaron los dos candidatos de Juntos por el Cambio: Néstor Grindetti y Diego Santilli, ambos con 13%, aunque Santilli se impuso por 42 votos.
Para presidente, en cambio, el candidato más votado fue Javier Milei, con 31,1%, aunque la fuerza política ganadora fue Unión por la Patria, que totalizó 35,1% entre Massa (25,3%) y Juan Grabois (9,8%). Patricia Bullrich (13,9%) quedó tercera, superando en la interna macrista a Horacio Rodríguez Larreta (11,5%).
