La Negra Radio tiene motivos de sobra para festejar. El programa semanal, que se emite los domingos de 20 a 22 por FM Escobar (105.1 Mhz), nació en agosto de 2003 como la hermana menor de la revista homónima dedicada a la cultura del rock, y como una forma de reflejar ese espíritu en el dial. Pero pronto se hizo de una personalidad propia y ganó un espacio. Ambos productos surgieron de la idea de Martín Pozzo y Gonzalo Monsalvo, quienes así encontraron la forma de difundir las manifestaciones artísticas del distrito y sus alrededores.
Fueron tiempos de vorágine, en los que mientras el programa crecía y demandaba esfuerzo, trabajo y dedicación, recibió también caricias al ego con nominaciones a importantes premios como los Martín Fierro, los Gaviota de Oro en Mar del Plata y los Premios Dorado, en Chaco. En La Plata se alzaron con el Galena y en Luján con el Negrito Manuel.
Por los estudios de La Negra Radio pasan alrededor de 100 artistas por año. Se han dado el gusto de recibir a Las pastillas del abuelo, El otro yo, Paul Di´Anno (cantante de Iron Maiden), Nonpalidece, Carajo, Los Gardelitos, Jóvenes pordioseros, Nativo y una extensa lista de etcéteras. En varias ocasiones con más de un centenar de personas en el estudio, que le dieron al momento una impronta más de recital que de programa de radio.
“Pero uno de nuestros mayores placeres es entrevistar y descubrir bandas nuevas locales o regionales. Escobar tiene muy buenos artistas noveles. Habría que parar más la oreja”, sugiere Pozzo.
El universo de escuchas de La Negra Radio comenzó con los jóvenes lectores de la publicación, a quienes se les fue plegando gente de todas las edades que ampliaron el espectro. Pero fue a través de Internet que el programa saltó las fronteras locales para ser escuchado en todas las provincias del país, en toda América e incluso en Europa. “Es increíble, tenemos mensajes que nos llegan de Colombia, España, Estados Unidos, Chile y México. También de argentinos residiendo en diferentes partes del mundo”.
La revista tuvo sus vaivenes desde el primer número, publicado en mayo de 2003. Comenzó con pocas páginas y hoy tiene 52, a veces con especiales de 56. La tapa y la contratapa pasaron del blanco y negro al color y también se superó la calidad de papel. Según Pozzo, los 2 mil ejemplares mensuales que se distribuyen en Escobar, Pilar, Zárate, Campana, Exaltación de Cruz, Luján y Tigre, “vuelan” por todos lados. Hay gente que les escribe de lugares insólitos y se sorprenden porque no tienen idea de cómo la revista llegó a esas manos.
“La presencia en siete municipios implica una cobertura e información constante en cada uno de ellos. Por ende hay que tener personal que se ocupe de los contenidos, la distribución, las cuestiones publicitarias y las relaciones públicas, entre otras cosas. Todo un gran laburo, pero el rock es una forma de vida y así la elegimos nosotros”, concluye Pozzo.