Los colores, la música y la diversión volvieron a las calles como en los viejos tiempos. Ninguna localidad del distrito quedó ajena a una celebración que estuvo absurdamente prohibida durante 15 años.
Carnaval
Escobar no tenía sin corsos callejeros desde 1995. Pero un grupo de organizaciones lo hizo posible.
Surgió en 2003, renació de sus cenizas y vuelve con toda la energía. Rescatar a los chicos de las calles es su objetivo fundamental. La conciencia social atraviesa este proyecto, sacado adelante a puro pulmón.