Por JAVIER RUBINSTEIN
Director de El Deportivo Magazine y El Deportivo Web
Alrededor del año 5.000 AC, los egipcios ya jugaban una forma de bochas con piedras pulidas. A América llegó de la mano de los primeros inmigrantes y tuvo rápida aceptación en el campo y los suburbios de incipientes poblaciones. Era más bien un juego de azar, que se practicaba en cantinas, boliches y otros sitios de diversión.
Con la fundación de la Federación de Bochas en la Capital Federal, en 1929, el juego se reglamentó en nuestro país, que lo introdujo como deporte.
En todos los centros de jubilados del partido de Escobar, y en algunos clubes de barrio, las bochas son la principal disciplina deportiva. Al igual que la pelota paleta -a la que esta sección dedicó un informe en diciembre pasado-, se trata de un juego de “grandes” y no tanto. Tiene su punto fuerte en jugadores de más de 50 años, pero varios con un par de décadas menos también empezaron a interesarse en “arrimar el bochín”, literalmente hablando…
Tan en serio se toman los amantes de este deporte sus encuentros que en el año 2000, celebrando la llegada del nuevo milenio, se creó la Liga Bochófila de Escobar, para facilitar y hacer más organizada la competencia Jubelén (1° campeón), CASI de Garin, Bochín Club, Defensores de Maschwitz y el Centro de Jubilados Ferroviarios de Escobar fueron los primeros en participar.
El torneo del 10° aniversario de la Liga, que actualmente preside Manuel Diaz, empezó a disputarse el 25 de marzo con la participación de 25 equipos (cada uno con tres titulares y un suplente) de instituciones como Villa Vallier -el que más títulos tiene-. Ferroviarios, Jubelén, Los Tulipanes de Garín, CASI, Lagomarsino y 12 de Octubre, de Benavidez, divididos en zonas hexagonales y con fechas los jueves y viernes por la noche.
Un referente de este deporte en Escobar es Aldo Olivieri, medalla de oro en la edición 09 de los Juegos Deportivos “Buenos Aires, La Provincia” y presidente de la subcomisión de Bochas en Jubelén. “Estamos bastante bien, con bochadores de alto nivel como Jorge Rodríguez, Juan Bordón, Julio Rochetta y Luis García, y buen recambio, con jugadores de cuarenta años para abajo”, señaló sobre el presente de la actividad el «Cholo”Olivieri a DIA 32.
“¿Si es difícil que a un chico le atraigan las bochas? No, se van entusiasmando con los torneos internos. Inclusive en el CASI hay varios de 15,16, 20 años, y en Jubelén también tenemos jovencitos. Sí hay que enseñarles a que no quieran sacar ventajas deportivas”, aclara Olivieri con mirada picara.
Los jugadores de bochas tienen su mundo. Amables, pacientes, siempre dispuestos, hacen de cada partido un culto y, según cuentan, el 98% de ellos son todos amigos y se visitan seguido Eso sí, nunca se le ocurra entrar a una cancha sin alpargatas blancas, es parte de la religión bochófila…
Copa Pedro Romano para Jubelén
Cuarenta equipos y un total de 160 jugadores participaron en enero de un torneo que puso en juego por primera vez la Copa “Pedro Romano”, organizado por la Liga Bochófila y jugado íntegramente en la cancha sintética del Centro Jubelén, cuyo cuarteto se consagró ganador.
La segunda edición del certamen está prevista para mediados de agosto, en coincidencia con el quinto aniversario del fallecimiento de Romano, un conocido comerciante de la ciudad cuyo recuerdo permanece vigente a través de este evento.